Bankia se somete de nuevo al veredicto del mercado

El plan de rescate de Bankia provocará hoy un examen general sobre la banca española y sobre la deuda pública. Bankia vuelve a la bolsa española después de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores suspendiera su cotización el viernes a petición de la entidad. La acción de Bankia vuelve hoy al mercado al precio de salida con que se quedó el jueves, 1,57 euros, menos de la mitad que el valor de su salida a bolsa en julio pasado. Hoy se verá si los inversores creen en el plan de saneamiento que los nuevos gestores de la entidad presentaron la tarde del viernes. El plan incluye una recapitalización ingente de los activos de la entidad con 19.000 millones adicionales, lo que eleva a 23.465 millones el montante total de dinero público que precisa la entidad. La evolución de la prima de riesgo servirá de indicio para interpretar si los mercados creen que España será capaz de afrontar en solitario el saneamiento de la banca o si tendrá que pedir ayuda a Europa. Cuando la CNMV acordó la suspensión, las acciones de la entidad se encontraban a 1,57 euros, un 58% por debajo del precio de la colocación en bolsa. Y todavía no han recogido el impacto de la reformulación de las cuentas ni de la ampliación de capital por importe de 12.000 millones de euros que se plantea en el plan estratégico. Son aproximadamente 350.000 los accionistas afectados, en su mayor parte pequeños inversores, puesto que en la salida a bolsa se colocó la mayor parte de las acciones en el tramo minorista, sobre todo entre los mismos clientes de la entidad. La ampliación de capital va dirigida a todos los acciones, pero si no acude nadie, será suscrita íntegramente por BFA (sociedad matriz de Bankia) que previamente se habrá convertido en una entidad 100% de capital público. Goirigolzarri espera que el Gobierno rentabilice su aportación a la entidad El presidente del grupo BFA-Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, precisó ayer que confía en que el Estado rentabilice la aportación que realizará para el saneamiento del grupo financiero, después de que el día anterior dijera que la entidad no tendrá que devolver nada al Estado porque "no es ayuda pública". "El Estado va a inyectar capital en Bankia y la obligación de una compañía cuando recibe capital, sea de quien sea, no es devolver dicho capital, sino ser capaz de generar valorar y ofrecer rentabilidad a esa aportación. Esa es la prioridad del nuevo equipo gestor de Bankia, hacer una gestión eficiente, austera y transparente que genere valor. Esa será la mejor manera de que el Estado, cuando lo considere oportuno y mediante el mecanismo que desee, pueda vender las acciones que va a tomar de Bankia al mayor precio posible con el consiguiente beneficio para los contribuyentes", afirmó. De esta forma, el presidente del grupo de Bankia confía en que el Estado obtenga beneficios del capital público que aportará la entidad. El grupo Bankia declara pérdidas récord en la banca española El Consejo del Banco Financiero y de Ahorros se reúne hoy para reformular sus cuentas de 2011. Los criterios aplicados por el nuevo equipo gestor llevarán a la entidad a declarar los peores resultados de la historia financiera española, según destaca EL PAÍS. BFA había declarado pérdidas en 2011 de solo 30 millones de euros, con lo que la nueva reformulación de las cuentas multiplicará por más de 100 estos resultados negativos. La matriz del grupo no solo consolida los nuevos saneamientos de Bankia, que han llevado los resultados desde los 305 millones de beneficio declarados inicialmente hasta las pérdidas de 2.979 millones finalmente reconocidas. Además de eso, BFA ha decidido reconocer cuantiosas pérdidas que no afectan a las cifras de la filial. Entre esas pérdidas destaca el impacto de 1.600 millones por la puesta a valor de mercado de las participaciones en empresas cotizadas, 1.000 millones más que los que se ha apuntado Bankia. Otros 1.000 millones más que la filial se apuntará por el deterioro de valor de las participadas no cotizadas, ya que el ajuste será de 2.300 millones en BFA frente a los 1.300 millones de Bankia. La partida que afecta de forma más diferenciada a BFA frente a Bankia será el saneamiento de créditos fiscales, partidas que figuraban en su activo porque se suponía que darían lugar a ahorros de impuestos con los beneficios futuros. BFA también necesita algunos saneamientos crediticios adicionales a los de Bankia. Todas esas partidas son las que llevarán a BFA a publicar unas pérdidas récord en la banca española y que dejarían al grupo en una situación de virtual quiebra técnica de no ser por la capitalización de los 4.465 millones inyectados por el FROB y la petición de otros 19.000 millones de nuevo capital público. Tras la aprobación de las cuentas, se espera que el Consejo de Administración de BFA dimita en pleno.
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